Ismara Vargas, directora de Asuntos Legales y Análisis de la Dirección General de Estados Unidos de la cancillería, dijo que desde época tan temprana como el año 1909, en la Conferencia Naval de Londres, quedó tipificado así el término de “bloqueo”, cuyo propósito es rendir por hambre y fuerza al otro contendiente.
En conversatorio sobre el tema, a propósito de los 60 años de oficializada esta política por el mandatario estadounidense John F. Kennedy, la diplomática subrayó que también los documentos oficiales de la nación norteña enuncian claramente la intención de privar a Cuba de recursos esenciales para la desarrollo de su economía.
Han sido 12 los gobiernos que han mantenido el bloqueo, sin embargo las agresiones y la asfixia contra la mayor de las Antillas iniciaron el propio triunfo de la Revolución cubana, explicitó Vargas en el evento realizado en el anfiteatro Enrique José Varona, de la Universidad de La Habana.
¿Cabría preguntarse cómo podría una economía de un país del primer mundo enfrentar de manera exitosa la aplicación de una política tan colosal como esa? Las posibilidades de éxito serían nulas, remarcó la especialista.
Por su parte, David Ramírez, funcionario del Minrex, enunció algunas de las medidas coercitivas, entre ellas la persecución a empresas que realizan préstamos o transacciones con Cuba, así como los obstáculos en el área de la navegación marítima, pues cualquier buque que atraque en puerto de la isla no puede tocar suelo americano durante seis meses.
De igual manera, mencionó la restricción del flujo de remesas y la inclusión de Cuba en la lista de países patrocinadores del terrorismo.
Al intervenir en el encuentro, Jorge Luis Cepero, también representante de ese organismo, enfatizó en el surgimiento y aplicación de la Ley Helms-Burton, cuyo fin es disuadir la entrada de capital extranjero a la isla y provocar la asfixia económica.
La activación del Título III de la normativa constituye una violación del derecho internacional, dijo.
Ambos funcionarios coincidieron en que el gobierno de Joe Biden, a pesar de sus promesas de campaña, no ha modificado ninguna de las políticas de Donald Trump, y su mandato puede considerarse una continuidad de estas políticas hostiles.
Como parte del intercambio con estudiantes y docentes, el joven Miguel Espinosa, de la carrera de Turismo, sostuvo que el bloqueo tiene como elemento añadido el bombardeo mediático.
“Eso implica que debemos actuar con más inteligencia, porque nos podrán imponer políticas, pero no nos pondrán quitar el derecho de elegir nuestro propio destino”, insistió.
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