Desde diversas regiones del país arriban o se aproximan a París miles de personas en camionetas, buses, automóviles y motos para protestar contra el pase de vacunación creado para enfrentar la Covid-19.
La movilización inspirada en los camioneros canadienses que bloquean Ottawa ha tomado en las últimas horas un matiz de protesta social, con la incorporación de sectores que denuncian el aumento del costo de la vida, en particular del combustible.
Desde temprano están movilizados policías y gendarmes en los puntos de acceso a la Ciudad de la Luz, tras la decisión de la Prefectura capitalina de prohibir la manifestación, orden avalada por la justicia.
El presidente Emmanuel Macron llamó a «la mayor calma», y dijo reconocer y respetar el malestar y el cansancio ciudadanos en el actual contexto de la pandemia de Covid-19.
Antes, el primer ministro Jean Castex había advertido que cualquier intento de bloquear a París encontrará una respuesta firme de la ley.
En apenas unos días cobró fuerza la convocatoria al convoy por la libertad, realizada en las redes sociales.
Un grupo creado en Facebook para promover la protesta alcanzó los 360 mil seguidores, además de incluir fotos y videos de participantes.
La llegada a la capital se produce o ocurrirá por accesos en dependencia del origen de las caravanas, y esta tarde la policía contabilizó unos tres mil 300 vehículos.
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