Hace muchas semanas, casi meses, Washington anunció que «el 16 de febrero el Ejército ruso invadiría Ucrania y Estados Unidos empleó todo su poderío para defender el país que ahora quiere colonizar», apunta un artículo del secretario general del PVP, Humberto Vargas.
Los rusos encontraron métodos originales para desmentir la propaganda norteamericana, pero los subalternos del presidente Joe Biden y él mismo mantienen su afirmación, señala Vargas en el texto, divulgado en el periódico Libertad, órgano del Comité Central de la agrupación política.
El presidente de Ucrania, Vladimir Zelensky, no cree en la invasión rusa, tampoco sus ministros de Seguridad y de Relaciones Exteriores. Los primeros daños los está produciendo la falsa propaganda montada por los imperialistas, refiere.
Los estadounidenses vendieron sus armas viejas e inservibles. Ucrania las pagará con el hambre de sus ciudadanos, afirma Vargas.
Tras expresar su seguridad de que se pondrán en evidencia las mentiras de Estados Unidos, el dirigente de los comunistas ticos aseveró que ese país usa las mentiras para someter a muchos pueblos.
A unos los esclaviza y en otros crean verdaderas epidemias de idiotismo político. Esa es la fuerza de la falsedad convertida en arma política, señaló.
Denunció que Washington mintió para acabar con la antigua Yugoslavia, el crimen de Vietnam, invadir Iraq y destruir Libia.
Asimismo, aseguró que, sobre la base de falsedades, el Gobierno estadounidense mantiene su bloqueo económico contra Cuba y la criminal conducta contra Venezuela, Nicaragua y Bolivia.
«Esa es una política genocida», puntualizó.
Rusia no invadirá Ucrania, ni el 16 de febrero ni en ninguna otra fecha en las condiciones actuales, sostiene Vargas y añade que es posible que los norteamericanos digan que dicha acción no se produjo gracias a su solidaridad.
Para el secretario general del PVP, ese constituye un viejo juego del imperialismo en crisis: usar la lógica del matón del barrio para obtener favores electorales, de los cuales está necesitado Biden, pero los réditos de la escalada no los recibirá.
Vargas puntualizó que tanto Estados Unidos como los subimperialismos europeos sancionan a otros países siempre a base de mentiras, pero llevan la podredumbre moral y el crimen por dentro.
«Son siglos de crímenes espantosos contra los pueblos. Fingen ser defensores de los derechos humanos, pero viven pegados a la faltriquera de los criminales yanquis», acota.
Concluye que a los estadounidenses y a los europeos los arrastrará a la corriente de los albañales el nacimiento de un mundo nuevo.
«Ese mundo nuevo nacerá, nadie podrá evitarlo», aseveró.
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