Este miércoles, el jefe del Ejecutivo recibió en la sede del Gobierno al embajador de La Habana en este país, Juan Valdés, quien finaliza su misión diplomática en Belarús.
“Sabemos en qué condiciones vive Cuba. Es una presión externa incesante, un bloqueo económico. Gracias a la sabiduría de los dirigentes y al coraje del pueblo cubano, ustedes pueden hacer frente a estas dificultades”, apuntó.
Durante el encuentro, Golovchenko subrayó la importancia de la seguridad alimentaria para el país e indicó que Minsk está interesado en avanzar en un grupo de proyectos conjuntos en la esfera agraria, la industria avícola y la ganadería.
“Entendemos que hay demanda en Cuba y se pueden aplicar tecnologías belarusas allí. Ahora los especialistas están trabajando en un plan de acción”, señaló.
Advirtió que el presidente belaruso, Alexandr Lukashenko, dio instrucciones para intensificar la implementación de todos los proyectos con Cuba y entrar en la consideración de otros nuevos.
Según Golovchenko, la puesta en práctica de esas decisiones está bajo el control del Ministerio de Relaciones Exteriores y del Gobierno. “Estoy seguro de que, cumpliendo con las instrucciones de los líderes de los Estados, encontraremos nuevas oportunidades para la cooperación”, apuntó.
El jefe de Gobierno recordó la importancia de la visita a este país, en octubre de 2019, del presidente cubano, Miguel Díaz-Canel, que en su opinión constituyó un impulso, una señal para el trabajo conjunto entre los círculos de negocios, ministerios y departamentos.
Señaló que, “lamentablemente”, poco después el mundo y los dos países debieron enfrentar el desafío de la Covid-19 que impidió la implementación de parte de los acuerdos establecidos entre ambos Gobiernos.
“Sin embargo, estamos recuperando posiciones. Según los resultados de 2021, el volumen de negocios aumentó tres veces. Hemos superado la recesión y vamos a un buen ritmo”, dijo.
El primer ministro belaruso significó que la pandemia no afectó la interacción entre Minsk y La Habana ante los organismos y organizaciones internacionales, así como el apoyo mutuo en las asociaciones de integración.
Subrayó la importancia de la participación de las autoridades cubanas en las reuniones regulares de la Unión Económica Euroasiática (UEE). “Estoy seguro de que, a pesar de la distancia geográfica entre Cuba y la UEE, en un futuro próximo el componente práctico de estado observador necesariamente dará frutos”, enfatizó.
Este año, Cuba y Belarús cumplirán tres décadas de relaciones diplomáticas y para el mes de marzo está prevista la realización en La Habana de una nueva reunión de la Comisión Intergubernamental.
Según fuentes diplomáticas cubanas, se abren proyectos conjuntos inminentes de inversión en turismo, agropecuaria, biotecnología.
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