Durante su presentación, los promotores indicaron que esta es la primera versión de una hoja de ruta para fortalecer las actividades de prevención, vigilancia y control de enfermedades como el dengue, zika, chikunguña, malaria, leishmaniasis y chagas transmitidas por insectos.
El coordinador de vectores de la cartera de Salud, Rodrigo Marín, señaló que el clima tropical de Costa Rica propicia la supervivencia, reproducción y capacidad de transmisión de enfermedades por parte de los insectos vectores presentes a lo largo del territorio.
En este sentido, apuntó que el plan busca dotar a la sociedad de una herramienta de gestión dirigida a guiar y fortalecer las actividades de prevención, vigilancia entomológica y control vectorial actualmente existentes.
Asimismo, prosiguió, incentivar la introducción de nuevas tecnologías y estrategias dirigidas a una planificación cada vez más costo-efectiva y sostenible de las intervenciones.
De su lado, la representante de la OPS/OMS en Costa Rica, María Dolores Pérez, aseguró que la implementación del plan de acción permitirá fortalecer la colaboración con nuevos actores.
Sostuvo que como parte de la iniciativa de la OPS/OMS para la eliminación de enfermedades transmisibles para 2030, las autoridades ticas establecieron el objetivo de eliminar enfermedades vectoriales como la malaria, leishmaniasis y chagas.
Datos oficiales reflejan que en 2020 se contabilizaron en Costa Rica 10 mil 56 casos de dengue, 528 de leishmaniasis, 107 de zika, 136 de malaria (importados y autóctonos), 50 de chikunguña y 20 de Chagas.
El Ministerio de Salud señaló que la vigilancia entomológica constituye un proceso continuo, orientado a la recolección, sistematización, análisis e interpretación de información referente a aspectos de la biología, distribución espaciotemporal, y densidad de las principales especies vectores en una determinada región.
Además, busca monitorear el desarrollo de resistencia a los insecticidas comúnmente utilizados, mientras que el control vectorial se enfoca en eliminar las poblaciones de insectos vectores o controlarlas a niveles que no constituyan riesgo para la salud pública.
Detalla que el plan dispone de cinco líneas estratégicas: Integración a varios niveles; Gobierno y comunidad; Programas y sistemas de control de vectores; Herramientas e intervenciones; Fuerza laboral y capacitación.
acl/ale