En medio de un aumento de las importaciones a partir de la reposición de inventarios en las empresas y una caída en las exportaciones, el indicador creció bruscamente un 7,1 por ciento durante el primer mes del año.
Las compras de bienes subieron un 1,7 por ciento, con mayor influencia de alimentos, vehículos de motor, suministros industriales, bienes de capital y de consumo, mientras las importaciones de otros cayeron, según dicha agencia federal.
El aumento está relacionado con un proceso de reconstitución de existencias tras los impactos de la pandemia en las empresas.
Las reservas de los mayoristas aumentaron un 0,8 por ciento y las de los minoristas un 1,9 por ciento, impulsados por un incremento del 2,4 por ciento en las reservas de vehículos de motor.
Mientras, las ventas bajaron un 1,8 por ciento durante enero, a partir de la disminución de negocios en torno a los bienes de consumo, los vehículos de motor, los alimentos y otros.
Por el contrario, las exportaciones específicas de bienes de capital y suministros industriales aumentaron.
En sentido general, de acuerdo con la información oficial, la inversión en inventarios aumentó a una tasa anualizada desestacionalizada de 171 mil 200 millones de dólares en el cuarto trimestre.
Sin embargo, ahora el ritmo de acumulación de existencias va en caída, y esto, junto al aumento del déficit comercial de bienes, podría pesar sobre el crecimiento económico del país hasta marzo, advierten expertos citados por medios locales.
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