Los ciudadanos rusos o belarusos, ya sea individualmente o en equipos, deben ser aceptados solo como atletas neutrales o equipos neutrales.
No se deben exhibir símbolos nacionales, colores, banderas o tocar himnos en eventos acuáticos internacionales que aún no forman parte de las respectivas sanciones de la Agencia Mundial Antidopaje hacia Rusia, precisó la entidad en un comunicado.
Además, la FINA le retiró al presidente ruso, Vladimir Putin, la Orden que le entregó en 2014 y mantendrá un monitoreo sobre la situación y tomará más decisiones según corresponda, puntualizó.
Por su parte, el comité ejecutivo de la Federación Internacional de Rugby (World Rugby) acordó suspender hasta nuevo aviso a las selecciones y equipos de Rusia y Belarús e inhabilitar de manera inmediata de la Unión de Rugby del primer país como miembro de ese organismo deportivo.
La World Rugby precisó que la decisión se adoptó en línea con las recomendaciones del Comité Olímpico Internacional (COI) y teniendo en cuenta los intereses de los valores de solidaridad, integridad y respeto del rugby.
Otra entidad deportiva, la Federación internacional de Hockey, decidió excluir a Rusia del Mundial Junior para damas, a disputar del 1 al 12 de abril en la Universidad de Potchefstroom, Sudáfrica.
Según ese órgano, responde a las sugerencias del COI de evitar la asistencia de atletas y oficiales rusos en competencias internacionales, para proteger la integridad de las competiciones deportivas mundiales y por la seguridad de todos los participantes.
Además, la Federación internacional de Remo confirmó que no permitirá la comparecencia de atletas y oficiales rusos y belarusos en ninguna de sus competiciones internacionales, con efecto inmediato y hasta nuevo aviso.
Rusia tampoco podrá organizar el Mundial de voleibol, previsto para agosto y septiembre, al serle retirada la sede por la Federación Internacional de la disciplina, y los patinadores rusos no podrán competir más hasta nuevo aviso, precisó la Unión Internacional de Patinaje.
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