Este viernes, el crudo estadounidense Western Texas Intermediate (WTI) se vendió a 113,36 el barril, lo que significó un alza del 5,24 por ciento
Mientras, el Brent del mar del Norte, de referencia en Europa, subió un 4,72 por ciento hasta 115,67 dólares el barril, tras rondar el jueves la barrera de los 120 dólares.
En paralelo, el precio del Title Transfer Facility (TTF) holandés, gas de referencia en el mercado europeo, alcanzó un máximo histórico de 213,895 euros por megavatio-hora.
Según expertos, las preocupaciones por la posible interrupción de las ventas desde Rusia, el mayor exportador mundial de crudo y productos derivados del petróleo, superan las expectativas de más envíos iraníes en caso de un acuerdo nuclear con Teherán.
El petróleo alcanzó su nivel más alto en una década esta semana y los precios registrarán sus mayores ganancias semanales desde mediados de 2020, y el índice de referencia estadounidense subió más de 18 por ciento y el Brent un 13 por ciento.
Una encuesta de Reuters a 35 economistas y analistas pronosticó que el crudo Brent promediaría alrededor de 91,15 dólares por barril este año y el WTI, cerca de 87,68 dólares, un salto considerable desde las predicciones de enero.
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