A través de su cuenta en Twitter, el también escritor apuntó que la obra de Walsh contribuyó a la construcción del género Testimonio. Sus novelas Operación Masacre y ¿Quién mató a Rosendo? fueron pioneras en este ámbito.
En la víspera, en un homenaje realizado en la embajada de Argentina en esta capital por el Día de la Memoria, por la Verdad y la Justicia de esa nación, diplomáticos, periodistas y activistas reconocieron la práctica literaria de Walsh como testimonio y denuncia de la dictadura cívico-militar en Argentina, instaurada tras el golpe de Estado de 1976.
Walsh participó en la fundación de la agencia Prensa Latina y logró descifrar los mensajes secretos que revelaban los planes de Estados Unidos de invadir a Cuba por Playa Girón, en abril de 1961, con exiliados cubanos.
El luchador fue asesinado por un grupo de tareas de la Escuela de Mecánica de la Armada después de difundir la Carta Abierta de un escritor a la Junta Militar, documento que expuso las violaciones de los derechos humanos y horrores perpetrados por la dictadura de su país.
Sus restos al igual que el de muchas víctimas del régimen (1976-1983) permanecen desaparecidos.
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