En el primer centro hospitalario de su tipo edificado totalmente por la Revolución cubana, y fundado por Fidel Castro hace 62 años, las inversiones van encaminadas a un nuevo servicio de hemodiálisis y una planta para el procesamiento de oxígeno.
Según reporta al portal web de Radio Cadena Agramonte, el doctor Arturo Amores , especialista en medicina Interna y director del centro de salud, “la sala de hemodiálisis ya se cuenta con el proyecto, realizado por la Empresa de proyectos de Ingeniería y Arquitectura número 11 y en esta semana comienza la demolición del local preparado para la instalación, la cual estará equipada con 12 riñones artificiales”.
El portal añadió que en el caso de “la planta de oxígeno, que llegará al hospital en abril, ya la obra civil se encuentra en fase de cimentación y tiene destinado un presupuesto de cinco millones de pesos, lo que permitirá producir 100 balones diarios de este gas para la asistencia médica y el tratamiento de pacientes graves, con marcado impacto entre los enfermos de la COVID-19”.
Precisamente la apertura de otro servicio en la nueva Sala de Infectología permitirá, entre otras facilidades sanitarias, minimizar los riesgos de transmisión interna de la enfermedad en la institución.
En una región donde aún es vigente la presencia del SARS-CoV-2, esta sala contará con todos los recursos tecnológicos, una treintena de camas, incluidas cuatro de intensiva.
Tras un largo batallar contra la pandemia más de 150 especialistas en Cirugía, Anestesiología y Reanimación, Ortopedia y Traumatología, llegaron a atender en cerca de dos años cerca a 10 mil pacientes, y hoy la expansión de sus potencialidades beneficia a disímiles personas con diferentes afecciones.
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