El tránsito por la Escuela Latinoamericana de Medicina (ELAM) primero, y ahora por el hospital universitario capitalino Miguel Enríquez para completar su formación, así como el empeño de sus profesores, le brindaron al alumno las herramientas necesarias para llegar junto a otros casi mil delegados a un congreso que apuesta por metodologías y soluciones concretas.
Reciben su atención, particularmente, las adicciones comportamentales provocadas en niños y jóvenes por la Covid-19, tema al cual ha dedicado horas de estudio y que pretende contrastar y enriquecer durante las sesiones de trabajo en el Palacio de Convenciones de La Habana.
Hoy se habla mucho de la adicción a las drogas por los jóvenes, pero poco de las de otro tipo relacionadas con el exceso del uso de las tecnologías y las redes sociales a causa del confinamiento que generó la mayor crisis sanitaria de los últimos tiempos, refiere el joven investigador en declaraciones a Prensa Latina.
“Por eso no dudé cuando supe del Congreso y me interesé en participar, compartir en este entorno donde hay investigadores de otros centros y países”, aseguró momentos antes de recordar aquella frase del líder histórico Fidel Castro en el año 1961, de que Cuba necesariamente tendría que convertirse en un país de hombres de ciencia.
El estudio en curso de su tema arrojó que si bien muchos niños y jóvenes utilizaron las tecnologías como forma de aprendizaje, en una parte significativa ello generó pérdida de habilidades sociales, adicciones y trastornos de conducta, así como la negación a realizar otras habilidades, y son estos asuntos a atender por la psicología y con estrategias puntuales.
Para Syldick no es el primer acercamiento desde la ciencia a un tema de investigación, pues antes motivaron en él la búsqueda de referentes teóricos y soluciones prácticas los problemas de salud en las adolescentes embarazadas y también la anatomía patológica.
“Resultó vital la formación recibida en la ELAM, centro al que felicito por recibir recientemente la acreditación de Excelencia y donde constantemente se realizan actividades científicas”, afirmó.
Sobre su futura superación, refirió el interés de cursar una especialidad sobre neurocirugía en la isla caribeña. “Quizás otras personas prefieren ver las dificultades económicas que tiene Cuba, yo me quedo con las oportunidades que brinda a jóvenes como yo, de formar parte del programa de Fidel”.
“Hace falta una juventud capaz de hacer el trabajo decisivo y la ciencia en ese camino es indispensable para contribuir al desarrollo del país”, insistió Syldick.
El Congreso Internacional de Infancias, Adolescencias y Juventudes propone por estos días el diálogo entre decisores y academia para la construcción colectiva de saberes y recomendaciones en función de las poblaciones infanto juveniles.
Temas como educación, inserción laboral, demografía, adicciones, salud, construcción de espacios protectores de no violencia, políticas de juventud, soberanía alimentaria, preparación cultural e identidad acompañan los debates hasta este jueves, que deberán ser compartidos luego en los centros de enseñanza y las comunidades.
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