Indicó que en comunicación con sus homólogos de la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio de Estados Unidos (NASA), la Agencia Espacial Europea y la Agencia Espacial Canadiense le dieron a entender que no se levantarán las sanciones impuestas contra una serie de fábricas de la industria espacial rusa.
“Creo que el restablecimiento de relaciones normales entre los socios sobre la EEI y otros proyectos conjuntos es posible solo con el levantamiento completo e incondicional de las sanciones ilegales”, publicó en su canal de Telegram.
Rogozin señaló que Roscosmos concretará ante el Gobierno ruso sus propuestas sobre los plazos para poner fin a la cooperación con las agencias espaciales de Estados Unidos, Canadá, la Unión Europea y Japón en un futuro próximo.
Según el jefe de Roscosmos, las respuestas de los organismos competentes de los respectivos países manifiestan su interés por trabajar junto a Rusia en las actividades asociadas a la explotación de la EEI.
Sin embargo, en el caso de la Agencia Espacial Europea señaló que “no resuelve estas cuestiones” y que transmitirá la solicitud de Moscú a los Estados miembros porque esos asuntos son de su competencia.
“Es decir, se nos ofrece esperar a que las burocracias de todos los 27 países de la UE se dignen a leer la carta de Roscosmos”, dijo Rogozin, quien advirtió que para entonces “la EEI habrá muerto por sí misma”.
El ejecutivo expresó que Occidente dejó claro que las sanciones contra las empresas del sector espacial ruso se mantendrán, aunque no se aplicarán al trabajo que responde a los intereses de la EEI porque el papel del país es crucial para la viabilidad y seguridad de la estación.
El director de Roscosmos subrayó que el objetivo de Occidente es “matar la economía de Rusia”. Aseguró que “está claro que no lo lograrán, pero las intenciones son obvias”.
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