Fue un emotivo acto organizado por la Embajada cubana para que las nuevas generaciones conocieran más de cerca la historia del Héroe Nacional, a pocos días de celebrarse el aniversario 127 de su desembarco en Cuba junto con el General Máximo Gómez, para incorporarse a la guerra independentista contra España.
En el lugar, el cónsul de la isla, Rainer García, disertó de una manera didáctica ante las nuevas generaciones y sus padres, acerca de los viajes del maestro a esta nación, y en específico a esta capital.
Explicó que el insigne patriota visitó en tres ocasiones Dominicana (1892, 1893 y 1895), antes de incorporarse a la guerra contra el colonialismo español, organizada por su genio y capacidad.
Y de los tres viajes, dijo, solo en el primero estuvo en Santo Domingo, el 18 y 19 de septiembre de 1892, estancia la cual aprovechó para recorrer sitios históricos y visitar la tumba de Cristóbal Colón, entre otras actividades, además de haber sido recibido en la sede de la Sociedad de Amigos del País, donde con su verbo electrizó a la concurrencia.
Como manifestó en uno de sus escritos el historiador cubano Carlos Rodríguez, sobre la visita: “llegó casi desconocido y en silencio a la ciudad matriz del Nuevo Mundo, y se marchó entre atronadores aplausos y muestras de cariño que lo acompañarían siempre”.
La casa San Pedro número 155 de la calle Las Mercedes, pareció este miércoles un lugar de reunión de Martí y sus hijos, y al decir de varios de ellos, tuvieron la impresión de ver a ese gran hombre caminar por las calles, llevando sobre sus hombros el peso de ese gran proyecto revolucionario que supo delinear.
Sin dudas, estos encuentros quedarán en la mente y corazones de quienes son la continuidad de esa gran obra legada por hombres que como Martí, dieron sus vidas por la causa cubana.
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