Los temas principales del encuentro, que se celebró a puerta cerrada durante la mañana, fueron el conflicto en Ucrania, la seguridad alimentaria y la recuperación ante la pandemia de Covid-19.
Sin embargo, los expertos ven poco probable que el bloque alcance consensos sobre desafíos como el cambio climático y el alivio de la deuda de los países pobres, mientras la mayoría de los debates se centran en la posición de Rusia dentro del grupo.
En una muestra de las marcadas divisiones sobre el tema, los representantes de varias naciones se retiraron de la sala o apagaron las cámaras de las computadoras cuando inició la intervención virtual del ministro ruso de Finanzas, Antón Siluánov, informaron medios de prensa.
La secretaria del Tesoro de Estados Unidos, Janet Yellen, el presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, el ministro francés de Finanzas, Bruno Le Maire, el comisario europeo de Economía, Paolo Gentiloni, y el gobernador del Banco de Inglaterra, Andrew Bailey, fueron algunos de los líderes que boicotearon al gigante euroasiático.
No obstante, Siluánov alertó de los nuevos riesgos para la economía mundial que representan las sanciones impuestas contra su país.
«La política fiscal y monetaria demasiado suave, implementada en los últimos años en los países desarrollados, ya creó el año pasado una presión inflacionaria, y las restricciones de las sanciones impuestas contra Rusia no solo la fortalecieron aún más, sino que también crearon nuevos riesgos en la economía», dijo.
Además, pidió a sus colegas y a los jefes de los bancos que eviten la politización del diálogo y subrayó que el G-20 «siempre ha sido y sigue siendo, ante todo, un formato económico».
Previamente, varios países occidentales expresaron su intención de excluir a la nación euroasiática del organismo a raíz del conflicto bélico.
Sin embargo, otros miembros del club de las 20 mayores economías del mundo, como China, India e Indonesia, que este año ostenta la presidencia de turno, no estuvieron de acuerdo.
A inicios de la semana, el ministro brasileño de Relaciones Exteriores, Carlos França, defendió la permanencia de Rusia y su participación en la cumbre de líderes, “pues su exclusión no aborda el verdadero problema, que es el conflicto”.
Mientras, la directora general del Fondo Monetario Internacional, Kristalina Georgieva, instó a los países del bloque a continuar su cooperación a pesar de las tensiones.
«Ningún país puede resolver sus problemas solo. Es evidente que la cooperación debe y va a continuar», sostuvo en conferencia de prensa.
Los líderes financieros se reunieron en el contexto de la conferencia de primavera que el FMI y el Banco Mundial celebran esta semana en la capital estadounidense.
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