Así lo reseña un artículo publicado por el Ministerio de Salud Pública (Minsap) de esta nación antillana al conmemorar este 29 el Día Internacional de la Inmunología, iniciativa impulsada en 2005 por la Federación Europea de las Sociedades Inmunológicas y celebrada a nivel mundial desde 2007.
De acuerdo con el comunicado, el enfrentamiento a la pandemia de la Covid-19 fue el colofón del impacto de la especialidad en el país con la contribución de los inmunólogos en el diseño y desarrollo de las vacunas cubanas, así como en la evaluación de su inmunogenicidad.
Tres inmunógenos: Soberana 02, Soberana Plus y Abdala; así como dos candidatos: Mambisa y Soberana 01, además de todos los niños de más de dos años inmunizados contra esa enfermedad colocan a la nación antillana en un lugar de avanzada a nivel mundial, resalta el texto.
Igualmente, la inmunología devino en factor decisivo en la creación de estuches diagnósticos basados en principios inmunológicos, y en el tratamiento de la infección a través de la inmunomodulación de la respuesta inmune con productos como la Biomodulina T.
Además de la transfusión de anticuerpos específicos provenientes de pacientes recuperados, el reposicionamiento de productos biotecnológicos, básicamente anticuerpos monoclonales y péptidos de acción antinflamatoria, utilizados en los pacientes graves y críticos.
Destaca también en la rehabilitación de convalecientes con inadecuada respuesta a la vacunación, reinfecciones y lesiones pulmonares como secuelas de la enfermedad.
El desarrollo de la inmunología muestra resultados favorables en la implementación del Programa Nacional de Atención Integral a las Inmunodeficiencias, indica el Minsap.
En este contexto se garantiza el diagnóstico, monitoreo y tratamiento de enfermedades complejas, y la introducción de nuevos procederes terapéuticos más efectivos.
La inmunología es trascendente el desarrollo de los estudios de histocompatibilidad o compatibilidad de tejidos, lo cual permite una mejor selección del donante para el trasplante renal y hematopoyético, destaca el documento.
Puntualiza, además, que las mejoras introducidas en el diagnóstico inmunológico y la aplicación de avanzados protocolos terapéuticos, posibilitaron que en Cuba alrededor del 80 por ciento de los niños aquejados de leucemia linfoblástica aguda, la enfermedad maligna del torrente sanguíneo más común en ese grupo etario, logren curarse.
También se observan avances promisorios en el control y supervivencia en pacientes adultos con leucemias.
Desde la inmunología y su aplicación práctica en la biotecnología cubana, han sido abordados tratamientos de otros tipos de cáncer, como el de pulmón, carcinoma de cabeza y cuello, gliomas, con vacunas propias y anticuerpos monoclonales registrados en el país caribeño y algunas naciones.
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