Los presentes exigieron la devolución a Cuba de la ilegal Base Naval de Estados Unidos ubicada en el municipio guantanamero de Caimanera, y apoyaron la proclama de América Latina como zona de paz, adoptada en La Habana en enero de 2014.
Igualmente, denunciaron los crímenes del imperialismo contra la humanidad y los instaron a cumplir con los principios y propósitos de la Carta de Naciones Unidas.
Durante el encuentro, el presidente del Instituto Cubano de Amistad con los Pueblos (ICAP), Fernando González, sentenció que el planeta ahora más que nunca necesita la paz, “y para lograrla necesitamos la unidad”.
En la actualidad, Estados Unidos posee unas de 600 bases militares en el extranjero, que mantienen, incluso, en contra de la voluntad de esos pueblos.
El seminario, auspiciado por el ICAP y el Consejo Mundial por la Paz fue escenario para denunciar la usurpación estadounidense en territorio cubano, así como los crímenes que realizan allí.
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