En declaraciones a Prensa Latina, el especialista aseguró que existen los recursos humanos y materiales necesarios para acometer tales trabajos, pero debe primar el cuidado, pues hay zonas inundadas y ello requiere el análisis de algunas variables.
Sobre la compleja zona del sótano del inmueble, en el que laboran sin descanso en la búsqueda de posibles sobrevivientes de la explosión ocurrida la víspera, Guzmán detalló que el lugar tiene varios metros cúbicos de escombros.
Por lo cual, precisó, evalúan el tipo de medios a utilizar para extraerlos sin afectar las estructuras, lo cual podría provocar un accidente.
«Se avanza, es un trabajo ingeniero que lleva mucha ciencia (…) y nos obliga a ser celosos con el personal», acotó.
El coronel ahondó momentos antes para la televisión nacional sobre los medios empleados, entre ellos los drones, la técnica canina y otros equipos especiales.
«Gracias a eso no hemos tenido que lamentar ningún accidente», puntualizó.
Reconoció además el trabajo conjunto entre los especialistas de rescate y salvamento, y otros profesionales que permiten agilizar las labores, pero sin perder la precaución.
El presidente Miguel Díaz-Canel destacó también este sábado en la red social Twitter las acciones realizadas y dijo que son sus hacedores «los héroes de estas horas terribles».
Lamentó en otro mensaje lo ocurrido, así como la destrucción, la pérdida de vidas y personas lesionadas en el accidente.
«(…) pero una vez más quiero destacar la rapidez con que se movilizaron la población y las instituciones. Ha primado la solidaridad», escribió.
Múltiples son las muestras de apoyo recibidas por Cuba tras los sucesos de este viernes, cuando el hotel Saratoga sufrió una destrucción parcial por una explosión mientras era abastecido de gas licuado.
Los centros hospitalarios de la capital se movilizaron de forma inmediata para la atención a los heridos, mientras varias instituciones de salud recibieron a miles de personas que acudieron a donar sangre.
Hasta el momento, las autoridades fijaron en 27 los fallecidos -incluida una turista española-, la mayor cifra de la capital del país, y otros de la provincia oriental de Holguín y de Matanzas, en el Occidente.
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