De acuerdo con las declaraciones de la experta, la isla cuenta con un sistema de enfrentamiento a eventos epidemiológicos contentivo de herramientas diseñadas para hacer frente a estas situaciones y aplicable a cada territorio.
Declaró que se trabaja intensamente para detectar cualquier posible caso, y especificó sobre la activación de métodos en pos de la investigación y la capacitación en el personal médico ante este escenario.
La hepatitis, refirió, es una inflamación del hígado con cuyas manifestaciones está familiarizado el personal de salud del país.
Según dijo, lo alarmante de este contexto, y por lo que la Organización Mundial de la Salud emitió una alerta, responde a la evolución tórpida en un porcentaje de los pacientes aquejados por el padecimiento.
Recomendó mantenerse alerta ante aparición de heces claras, orinas oscuras o de ictericia (coloración amarillenta de la piel).
Igualmente, aconsejó acudir a un centro asistencial si existiese una sospecha de la enfermedad, beber agua de fuentes seguras, mantener el lavado frecuente de las manos y la desinfección de superficies y no automedicarse.
Si bien hasta la fecha Cuba no reporta sospechosos con esta dolencia, diariamente se realizan pruebas de laboratorio en el Instituto de Medicina Tropical Pedro Kourí para la pesquisa de posibles casos, declaró recientemente el ministro del Minsap, José Ángel Portal.
Además de las medidas tomadas para el aseguramiento técnico para el diagnóstico y atención de la infección, se constituyó un equipo de expertos para respaldar su enfrentamiento, señaló igualmente.
Acorde con infamaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS), hasta la semana pasada se recibieron en la entidad, reportes de 348 posibles casos de hepatitis infantil aguda de origen desconocido en una veintena de países, mientras otros 13 se mantienen bajo investigación.
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