En conferencia magistral, en esta ciudad al centro de Cuba, subrayó que hoy la visión del avance social descansa en la electricidad; sin embargo, para que ese desarrollo social sea sostenible, tiene que hacerse con energía solar.
“Resulta inconcebible el desarrollo sostenible a partir de fuentes de energía contaminantes del medio ambiente con consecuencias catastróficas causantes del cambio climático”, señaló el experto.
Indicó que se denomina electricidad solar a la energía renovable obtenida directamente de la radiación solar mediante un panel que, a su vez, la transforma en energía eléctrica.
Señaló que, en el caso de Cuba, motivado por las carencias financieras y asfixias prohibidas de mercados a consecuencia del cruel bloqueo de Estados Unidos, pudiera resultar más barato lograr electricidad a partir de la energía producida por los rayos solares.
“La energía solar recibida en Cuba es mil 800 veces mayor que el petróleo empleado en el archipiélago, con un potencial de 150 kilowatt/hora por cada metro cuadrado al mes” explicó el experto.
El doctor Bérriz consideró la necesidad de que los municipios recurran, de manera preferencial, a la utilización de residuales de origen animal o vegetal tanto para producir electricidad como calor dirigido a múltiples usos, con vistas evitar focos de contaminación ambiental y obtener biofertilizantes que no agredan a la atmósfera.
Subrayó que el amplio mosaico de las fuentes energéticas incluye la utilización del sol (solar), el viento (eólica), el agua (hidráulica o hidroeléctrica) y la biomasa vegetal o animal sin necesidad de recurrir a los combustibles tradicionales.
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