Los desafíos durante los últimos años, en particular la guerra terrorista y el bloqueo económico, se basaron en una postura perdida y miope de algunos gobiernos en Occidente y la Región, dijo el jefe de la diplomacia durante un acto de homenaje a ex embajadores de esta nación.
Agregó que Damasco no se rindió ni cambió sus posturas y decisiones de principios a pesar de las presiones, el terrorismo, la agresión y el cerco político y económico.
Los días han demostrado la fortaleza de este país y la perdurabilidad de sus instituciones, y la mayoría de los que apostaron por nuestra derrota reconocen hoy que la dirección política y militar sirias nunca tenían entre sus alternativas la rendición, manifestó.
Según aseguró al-Mekdad, la diplomacia siria mantendrá su enfoque de trabajo sobre la base de la sabiduría y la paciencia para superar los desafíos nacionales, regionales e internacionales.
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