Las normativas incluyen la reducción del 50 por ciento de la generación de elementos nocivos a la atmósfera para 2030 como el óxido de nitrógeno y el amoníaco, lo que pudiera perjudicar la producción ganadera, según fuentes del sector.
El malestar entre los gremios se debe a que el ejecutivo los culpa de “forma injusta y con escasa preocupación por su futuro”, mientras el primer ministro Mark Rutte descartó negociar con los productores responsables de protestas radicales.
Los trabajadores emplearon camiones y tractores para bloquear centros de distribución de supermercados, en tanto en el Aeropuerto de Schiphol, en esta capital, los empleados instaron a los viajeros a emplear el transporte público para llegar a sus terminales por temor a bloqueos.
Como gesto de solidaridad grupos de pescadores cerraron también varios puertos de Ámsterdam, según la prensa local.
Los protestantes mostraban pancartas y banderas ante la mirada de las fuerzas del orden que no intervinieron, según imágenes de la prensa local.
Pero la organización sectorial de supermercados pidió la adopción de medidas ante la posible escasez en los estantes de las tiendas.
Los bloqueos de centros de distribución afectan a los ciudadanos (…) y podrían provocar que la población no pueda hacer su compra diaria, indicó en un comunicado de su lado la Oficina Central de Comercio de Alimentos.
En tanto las partes eligieron a negociadores con vistas a intentar hallar una solución satisfactoria para ambos bandos .
mem/ehl
