Hasta la sede de la embajada en esta capital, llegaron cubanos residentes en el país, miembros de la solidaridad, de partidos políticos y organizaciones sociales, para compartir entre todos, en una velada cultural que se convirtió en una muestra de amor por la isla y su revolución.
En múltiples pancartas podían leerse mensajes de apoyo a Cuba, su pueblo y sus líderes, entre los cuales estaban: Viva Cuba, Patria o Muerte y portaban fotos del líder histórico de la Revolución, Fidel Castro, y del guerrillero heroico, Ernesto Che Guevara.
El coordinador de la Campaña Dominicana de Solidaridad con Cuba, Roberto Payano, al intervenir en la actividad, reiteró el apoyo a Cuba y recordó la resistencia de ese pueblo ante los norteamericanos.
Por su parte, el presidente de la Asociación Máximo Gómez de cubanos residentes, Nelson Valdés, manifestó el deseo de paz, el bien de su Patria y llamó a luchar contra el cerco económico, comercial y financiero que le imponen desde el norte a su país.
Hubo intervenciones de representantes de los partidos, de cubanos residentes, y de amigos en general, en las cuales primó el apoyo a la isla caribeña y la exigencia a que sean eliminadas las sanciones de Estados Unidos.
En el acto, la embajadora de Cuba Milagros Carina Soto hizo un recorrido histórico donde demostró como el Gobierno estadounidense siempre quiso tener bajo su tutela a la Isla, cuestión que dura hasta nuestros días.
Explicó el surgimiento del bloqueo, principal causa que impide el desarrollo de la isla, el cual fue impuesto con el propósito de destruir ese proceso revolucionario de independencia y soberanía.
Finalmente, reiteró que su país es un territorio de paz, el cual derrocha amor contra el odio destilado por sus enemigos a diario, con el único objetivo de derrocar a la Revolución y hacía esa dirección enfocan sus armas, enfatizó.
Y denunció que en los últimos años, más de 200 millones de los fondos públicos de Estados Unidos, son dedicados a la desestabilización de la isla caribeña.
En el transcurso de la actividad, un pequeño grupo de elementos contrarrevolucionarios se congregaron a pocos metros de la Misión Diplomática para sumarse a los intentos desestabilizadores contra la isla, pero recibieron un rotundo rechazo de los presentes.
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