Así lo indicó la ministra de Finanzas y Precios (MFP) Meisi Bolaños al informar sobre el cumplimiento de la ejecución del Presupuesto del Estado cubano en 2021, durante el IX periodo ordinario de sesiones de la Asamblea Nacional del Poder Popular (ANPP)(parlamento).
Un informe sobre el tema circulado a los parlamentarios refirió que el 2021 fue el año de mayor impacto de la Covid-19 en Cuba y el primero en la implementación de la tarea ordenamiento monetario, cambiario y financiero, lo que implicó un proceso de reconversión del presupuesto.
El déficit fiscal fue superior a los 63 mil 696 millones de pesos, alto y con fuerte impacto en el PIB pero inferior a lo aprobado para esta etapa, lo cual estuvo mediado por el desembolso de más de 17 mil millones de pesos en el enfrentamiento a la pandemia de Covid-19, la inejecución de gastos por incumplimientos del plan de inversiones y el sobrecumplimiento de determinados ingresos.
En ese sentido se asumieron los gastos de la reforma general de salario, el subsidio de productos y servicios de alto impacto y las demandas del sector empresarial, que alcanzaron los 16 mil millones de pesos.
Además se destinaron dineros al desarrollo de los candidatos vacunales contra el SARS Cov-2 y para la protección financiera por asistencia social y el pago del salario a los trabajadores de actividades que se detuvieron durante la etapa de cuarentena.
La actividad presupuestada, donde residen los programas sociales del país, constituyó el 71,3 por ciento del gasto total, lo que sustenta el marcado carácter social del presupuesto del Estado.
De acuerdo con el informe presentado a los diputados, en 2021 el presupuesto cubano asumió el 32,4 por ciento de los gastos de la actividad presupuestada se concentraron en la salud pública.
Más de 57 mil millones de pesos se destinaron a la actividad no presupuestada, fundamentalmente en el subsidio a precios y tarifas minoristas, el financiamiento de unidades presupuestadas con tratamiento especial y a empresas con pérdidas (más de 10 mil millones de pesos).
Los ingresos al presupuesto registraron un sobrecumplimiento del cuatro por ciento de manera global, pero fueron impactados negativamente por las pérdidas empresariales, la evasión fiscal y la contracción de las actividades del sector privado de la economía.
Bolaños señaló como retos perfeccionar los mecanismos para captar ingresos y lograr una mejor aplicación de las políticas de precios.
Señaló que se labora en la elaboración del proyecto de Presupuesto de 2023 el cual priorizará el sector social y propone medidas para captar mayor cantidad de ingresos y combatir la inflación.
Los diputados cubanos analizan temas de la economía, la situación epidemiológica del país y la implementación de nuevas leyes durante el IX periodo ordinario de sesiones de la ANPP, el cual concluirá este viernes 22 de julio.
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