El presidente de la república, Miguel Díaz-Canel, y el primer ministro Manuel Marrero asistieron al espectáculo artístico de menos de una hora de duración presentado sobre el escenario del teatro patrimonial Tomás Terry.
La inconfundible música que hace la orquesta Aragón, la bien llamada Charanga Eterna fundada en Cienfuegos el 30 de septiembre de 1930, puso el broche de cierre al programa con antológicas canciones tarareadas por el público como la mundialmente conocida “pare cochero”.
El paseo musical de la velada tuvo una estación especial dedicada al género del bolero y uno de sus más brillantes cultores, Benny Moré (1919-1963), también hijo de esta provincia.
No pudieron faltar al convite otras expresiones musicales identificativas del ser nacional, el punto cubano y sus tonadas, propio del campesinado, y la rumba de rica raíz africana nacida en los barrios más pobres de las ciudades de La Habana y Matanzas.
El son, otra de las esencias musicales con que la isla mayor del Caribe inundó el pentagrama mundial, estuvo defendido por el conjunto de sones Los Naranjos, otra página de oro de la cultura local que en 2026 cumplirá un siglo de vida.
Poemas del poeta Nacional Nicolás Guillen (1902-1990) y del trovador cienfueguero Lázaro García (1947-2022) completaron la entrega cultural, también matizada por la danza y videos que retratan a la ciudad conocida por la Perla del Sur cubano.
Unos 10 mil cienfuegueros participarán al amanecer de mañana martes en el acto central por el Día de la Rebeldía Nacional.
El 26 de julio de 1953 un grupo de jóvenes liderados por Fidel Castro, y que luego la historia de Cuba identificó como la Generación del Centenario, atacó los cuarteles Moncada (Santiago de Cuba) y Carlos Manuel de Céspedes (Bayamo), acciones que el propio líder calificó como el motor pequeño que echó a andar el motor grande de la Revolución.
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