Los sirios y cubanos presentes en la actividad destacaron la importancia histórica de esta portentosa acción revolucionaria y ratificaron el espíritu de solidaridad, lucha, soberanía y apoyo mutuo que une a este país y la isla.
El embajador cubano, Miguel Porto, dijo en unas palabras pronunciadas durante el acto que la patria hay que defenderla y el pueblo cuenta con suficiente decoro y dignidad como para no poder ser puesto de rodillas.
La revolución no se lleva en los labios para vivir de ella, se lleva en el corazón para morir por ella, manifestó el diplomático.
Denunció las sistemáticas campañas de mentiras, manipulaciones, calumnia y tergiversaciones que llevan a cabo los grandes medios corporativos, particularmente en las redes sociales, para desmoralizar la Revolución Cubana, algo que hicieron también con Siria.
Trabajan constantemente para atacar cuanta persona honesta que defiende otras ideas que no sean las pre-establecidas acorde a sus intereses mercenarios, incluso desplegaron una brutal guerra mediática contra las vacunas cubanas que no tenían otro fin que salvar vidas, indicó el jefe de la misión.
A su vez, el director del mausoleo, el general de brigada Zain Mahmoud, felicitó al pueblo cubano por esta fecha histórica y destacó la fraternidad y la unidad de lucha entre los dos países frente al Imperialismo.
Los presentes aprovecharon la ocasión para reiterar el respaldo permanente, la solidaridad con la Revolución y el pueblo cubano, y el apoyo al reclamo del cese inmediato e incondicional al ilegal, criminal y cruel bloqueo impuesto por Estados Unidos a la isla.
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