En declaraciones a la emisora Radio 24, Salvini calificó de “tonterías” las acusaciones en tal sentido formuladas este jueves en un artículo aparecido en el diario La Stampa, titulado Sombras rusas detrás de la crisis.
La publicación dio a conocer una conversación a fines de mayo entre un funcionario ruso y un asesor de Salvini, donde el primero preguntó si dada la posición de La Liga contra el envío por Italia de armas a Ucrania, ese partido contemplaba la renuncia de sus representantes en el gobierno.
El tema desató un escándalo en este país y se espera que en las próximas horas se debata el asunto en el Comité Parlamentario para la Seguridad de la República (Copasir), según anunció el senador por el Partido Demócrata (PD) Ernesto Magorno, secretario de ese órgano.
En criterio de observadores, una campaña sobre la presunta injerencia rusa y el supuesto papel de Salvini, sirve a oponentes políticos para afectar el apoyo electoral a su partido, La Liga, que integra una alianza derechista favorita para imponerse en los comicios del 25 de septiembre.
El presidente del PD, Enrique Letta expresó por su parte que «los informes de prensa de hoy sobre los lazos entre Salvini y la Rusia de Putin son inquietantes, la campaña electoral comienza de la peor manera”.
El ministro de Asuntos Exteriores de Italia, Luigi Di Maio, quien lidera el Partido Juntos por el Futuro, atizó las acusaciones sobre la presunta intromisión de Moscú al señalar esta mañana que “debemos tener cuidado con las influencias rusas en esta campaña electoral».
Salvini apuntó durante la entrevista que “la política internacional es independiente de los gobiernos, somos orgullosamente aliados de los países occidentales”, pero aclaró que “esto no significa no querer buenas relaciones con Putin”.
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