Ese flujo migratorio se agudizó a finales de febrero tras el comienzo de la operación militar de Rusia en el Donbass en respuesta a ocho años de asedio militar del gobierno Kiev contra esa población de mayoría ruso parlante.
Los ejecutivos de las autoproclamadas repúblicas populares de Donetsk y Lugansk solicitaron a Moscú su intervención tras lo cual el Kremlin alertó que el despliegue persigue desmilitarizar y desnazificar Ucrania.
Países como Polonia, República Checa y esta nación albergaron desde entonces millones de refugiados, pero también a miles de efectivos de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), con el objetivo de cercar militarmente a Rusia, de acuerdo con declaraciones desde Moscú.
En la pasada jornada 114 mil 874 extranjeros cruzaron los puestos fronterizos rumanos, entre ellos los procedentes de Ucrania, según un comunicado publicado en el sitio web de la entidad.
El portal agrega que desde finales de febrero el total de migrantes desde la vecina nación que arribó aquí asciende a un millón 716 mil. En tanto la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados estima en más de 9,9 millones la cifra de personas que huyeron de las hostilidades en Ucrania.
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