Tras el tradicional desfile de artistas por una de las céntricas calles de esa urbe marina, Jorge Perugorría, presidente del FIC, mediante un video mensaje, dedicó palabras a los médicos por su profesionalidad y entrega durante estos años de pandemia, que mantuvieron en pausa la realización del evento.
Asimismo, agradeció el esfuerzo de las instituciones culturales del país por apoyar la edición 16 del FIC de Gibara, en un contexto económico muy complejo para la Isla.
Perugorría resaltó que el Festival será otro reencuentro con Humberto Solás, quien fundó este proyecto tras el rodaje de Miel para Oshún, la primera película digital realizada en Cuba con bajo presupuesto.
Por su parte, Sergio Benvenuto, director general del evento, destacó que regresa el cine este año a Gibara, y con ello se suman nuevas experiencias a las más de dos décadas de alianza, complicidad y de fuerte interacción cultural formativa del certamen.
Benvenuto significó que el Festival ha posibilitado visibilizar internacionalmente las potencialidades de la también conocida como Villa Blanca de los Cangrejos, donde se ha logrado fraguar una cultura del desarrollo local sostenible y se consolida como un destino turístico.
En la apertura, se rindió homenaje a dos grandes del cine cubano, los actores Mario Limonta y Mario Balmaseda, a quienes se les confirió el premio Lucía de Honor, en reconocimiento a una vida consagrada al séptimo arte.
En esta ocasión la muestra en concurso comprende nueve películas de reciente factura, 17 documentales (entre cortos y largos), 11 cortometrajes de ficción y siete de animación.
De esa forma, hasta el 6 de agosto los asistentes podrán disfrutar de producciones audiovisuales nacionales y foráneas, así como de presentaciones de libros, exposiciones de artes plásticas y conciertos, entre otras actividades.
Con el slogan ¡Volver al cine!, el FIC de Gibara rendirá homenaje al Premio Nacional de Cine 2007, Nelson Rodríguez, quien falleció en el 2020 y fuera uno de los editores más importantes del país y de algunas de las películas más relevantes de la cinematografía nacional, como Memorias del subdesarrollo y Lucía.
El Festival Internacional de Cine de Gibara surgió en 2003, con el nombre de Festival de Cine Pobre de Gibara en la localidad marina de mismo nombre, a unos 700 kilómetros al este de La Habana.
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