De visita en la más sureña de las 13 regiones francesas, el titular precisó que la medida permitirá un mejor manejo de la situación creada y el reconocimiento a los profesionales involucrados en la respuesta al mal tiempo que la víspera azotó a la ínsula con vientos de más de 220 kilómetros por hora, causando además una veintena de heridos y severos daños materiales.
Ante la polémica por la demorada declaración de la alerta en Córcega, Darmanin prometió una investigación para conocer detalles de la decisión.
Esperábamos vientos de 100 kilómetros por hora, pero estos superaron los 220, esgrimió el funcionario, quien destacó que en las últimas horas no se encontraron otros cuerpos sin vida, por lo que el saldo humano a lamentar se mantiene en cinco fallecidos, entre ellos una menor de edad.
Según el ministro del Interior, las noticias son alentadoras sobre las cuatro personas con lesiones muy graves.
Respecto a los evacuados de campismos, señaló que ya pueden retornar a las instalaciones turísticas de la llamada en Francia “la isla más bella”, aunque algunos de esos sitios pudieran no estar en condiciones de acoger a visitantes por los daños sufridos.
La víspera, el presidente Emmanuel Macron manifestó desde sus vacaciones en fort de Brégançon solidaridad con Córcega y las víctimas de la tormenta.
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