La conformación de la propuesta danzaria, incluida en la cartelera del 27 festival internacional de esa disciplina, previsto del 20 de octubre al 13 de noviembre próximos, responde a un pedido de la directora artística del conjunto de la mayor de las Antillas, Viengsay Valdés.
Durante un encuentro con la prensa especializada, Lang aludió a la concepción de ese trabajo artístico como un mensaje de esperanza y color, en un escenario marcado por experiencias oscuras globales y calificó de especial el intercambio con la agrupación caribeña.
La virtuosa del país norteño refirió que este viaje “es un gran momento en mi carrera de más de dos décadas” y detalló la incorporación a la puesta en escena del concierto para piano y orquesta No.5 en re mayor, del reconocido compositor y profesor austriaco Wolfgang Amadeus Mozart.
La creación involucra a 24 bailarines, igual cantidad de hombres y mujeres, acompañados por esa música, ideada por el talentoso pianista cuando solo tenía 17 años y con una energía y tempo ideales para esta pieza, especialmente diseñada para el BNC.
Lang apreció, asimismo, la asistencia creativa de Kanji Segawa, exintegrante del Unique Ballet Theatre de Tokio y perteneciente a su equipo desde 1999, y alabó la pureza de corazón y espíritu, talento y amor de los bailarines de la isla en la defensa de la danza como lenguaje universal.
La aclamada artista, valorada por la crítica como una maestra de la composición visual, laboró durante 12 años en distintas compañías hasta la creación de su propio grupo en 2011 y posee un repertorio conformado, entre otras, por las obras Thousand Yard Stare, alusiva a la violencia y los afectados por la guerra.
La producción de Lang tiene entre sus peculiaridades más notorias, identificadas por los expertos, las impresionantes coreografías, escenografías, luces y música generalmente original; así como, la mezcla de ballet y danza moderna en la indagación de lo corpóreo y el movimiento.