“Revista científica publica estudio de correlación de los ensayos desarrollados en Cuba, UMELISA® SARS-CoV-2 Anti RBD para la detección de anticuerpos, el ensayo de inhibición de unión al ACE-2 y el de neutralización viral, con el ensayo Elecsys® Anti-SARS-CoV-2 S (Roche)”, subraya un mensaje del CIGB en su cuenta de Twitter.
El colectivo de autores de la nación caribeña explicó que el SARS-CoV-2 es un coronavirus que por su morbimortalidad planteó un enorme problema sanitario, social y económico a nivel mundial desde 2019.
Según los expertos antillanos “es de suma importancia obtener tratamientos efectivos que puedan disminuir las muertes, secuelas y vacunas para retardar o prevenir la transmisión viral, y así reducir la gravedad de la enfermedad o la muerte.
Abdala es una vacuna cubana basada en la subunidad RBD recombinante de la proteína espiga expresada en la levadura Pichia pastoris, puntualizaron los especialistas.
Demostró una alta eficacia del 92,28 por ciento en ensayos clínicos de fase III para reducir la transmisión y más del 90 de efectividad para disminuir la gravedad de la dolencia y la mortalidad.
Los títulos de anticuerpos en los vacunados con Abdala fueron evaluados utilizando la prueba Elecsys® Anti-SARS-CoV-2 S.
Quince días después de la inmunización, –destaca el artículo- los sueros de los inmunizados mostraron títulos altos de anticuerpos. Los anticuerpos de clase IgG fueron cuantificados mediante la prueba UMELISA SARS-CoV-2 ANTI-RBD, aprobada por el Centro de Control Estatal de Medicamentos y Dispositivos Médicos de Cuba, y comercializada por el Centro de Inmunoensayo.
La prueba es un ensayo cuantitativo automatizado basado en fluorescencia que utiliza placas ultramicro-ELISA recubiertas con el fragmento RBD de la proteína S del virus como fase sólida.
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