Poner fin a la ocupación de territorios sirios y detener el apoyo a los grupos armados ilegales es un preludio natural para recuperar las relaciones sirio-turcas a la forma en que eran antes del 2011, dijo el canciller en declaraciones a la cadena rusa RT y publicadas por varios medios aquí.
Manifestó la disposición de construir relaciones buenas y normales con el pueblo turco, pero siempre que no sea a expensas del territorio y la sangre de los sirios, y exigió a Ankara que deje de cortar el agua y bombardear las zonas fronterizas en el norte sirio.
Estas no son condiciones sino cuestiones naturales en el trabajo político, y el gobierno turco debe detener estas acciones para recuperar las relaciones a lo que eran antes, aclaró el canciller.
Asimismo, se preguntó ¿cómo puedo llegar a un entendimiento con alguien que ocupa mi tierra y no muestra ningún interés o importancia para resolver este problema?
El jefe de la diplomacia siria indicó que la ocupación turca podría durar pero correrá al final el mismo destino de la ocupación estadounidense de Iraq y Afganistán.
Afirmó que los cálculos turcos de derrocar al gobierno sirio fallaron, y se percató al final que Siria luchó, resistió y no cedió ni un paso.
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