“…yo soy un hombre sin sombra”, escribió el también narrador y periodista, poema que destacó este viernes la Unión de Escritores y Artistas de Cuba (Uneac), organización de la cual fue fundador y miembro de su Consejo Nacional.
En su cuenta de Twitter, la Uneac recordó su centenario y calificó al Premio Nacional de Literatura 1995 como un faro orientador de generaciones de poetas.
El onomástico del Indio Naborí fue reverenciada por estos días en la isla caribeña con un variado programa de actividades que incluyó la presentación de un documental, un libro y un CD sobre su vida y obra.
Como para de la conmemoración tuvo lugar en el Centro Fidel Castro, de La Habana, un panel dedicado a la poesía política del también decimista y cantante, realizado.
En el homenaje, Alba y Fidel Orta, sus hijos, rememoraron la trayectoria del Indio Naborí, que dedicó gran parte de su obra a enaltecer los valores de la Revolución y de su máximo líder.
La autora de “El retorno del quinto mago. Naborí: vida y poesía”, libro de memorias sobre su padre, hizo un recorrido por la vida del intelectual cubano (1922-2005), que vivió una infancia dura, sufrió el desalojo y luego la pérdida de su casa a causa de un huracán.
Mencionó cómo enfrentó muchos obstáculos para estudiar, pero así y todo bebió de la literatura de manera autodidacta hasta convertirse en uno de los más reconocidos decimistas y repentistas cubanos, de gran arraigo entre la población rural y citadina de la nación antillana.
Señaló que no hay nada más parecido a él que su propia poesía, motivo por el cual nunca quiso escribir sus memorias, por lo que quien quiera conocerlo de verdad solo debe acercarse a su obra, lo mismo a la escrita que a la oral.
El narrador Fidel Orta destacó la impronta de las luchas revolucionarias y el magnetismo emanado del pensamiento de Fidel Castro, desde que lo conoció en 1952, en la obra poética del Indio Naborí, lo que hizo que desde 1959 hasta 1972 se consagrara por completo al servicio del proceso social emprendido en Cuba, aunque ya desde mucho antes lo acompañó con su verso.
Resaltó que no hubo acontecimiento trascendental en la isla caribeña durante sus años de creación que no contará con la rima poética del escritor, “un poeta de emociones, emociones que buscaban el tema”, al decir del director de la Oficina de Investigación y Promoción Cultural Indio Naborí.
Para el hijo, otro estudioso de la obra de su padre, más allá de su extensa obra poética, Jesús Orta renovó la décima cantada y escrita, vigorizó la elegía, le otorgó un inusual rango de perpetuidad a la lírica social, su energizó el verso libre, entre otras aportaciones.
Como parte de la celebración, está semana estaba prevista la realización del Primer Congreso Iberoamericano de la Décima y el Verso Improvisado bajo el lema Ven con tu décima mía, el cual fue pospuesto debido a los daños ocasionados en la isla por el huracán Ian.
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