Diplomáticos, funcionarios y trabajadores aprovecharon el tránsito por esta capital de Marrero, quien desarrolló una gira por países asiáticos, para realizar la entrega simbólica, enmarcada en una iniciativa más amplia con la que buscan ayudar a sus compatriotas tras el reciente devastador paso del meteoro por el occidente de la nación antillana.
El embajador Vaillant explicó al primer ministro que se trata de un gesto pequeño, pero de mucho amor, en nombre de los niños de la misión, como un primer paso dentro del objetivo de apoyar a las víctimas de Ian en momentos tan difíciles.
Asimismo, destacó la solidaridad con Cuba en Francia de asociaciones, sindicatos y personas, traducida en el envío de contenedores y donaciones y en la transferencia de dinero ante eventos como el incendio en la Base de Supertanqueros de Matanzas y del propio huracán.
Marrero reconoció la iniciativa y se comprometió con entregar los juguetes en los próximos días en la occidental provincia de Pinar del Río, severamente golpeada por Ian.
El primer ministro afirmó que conmueve la solidaridad evidenciada en las últimas semanas, tanto entre cubanos como la materializada desde el exterior.
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