Esa estadística significa que cada dos horas nace en el país un niño de una madre adolescente, «y la única forma de evitarlo es mediante la prevención y la educación”, declaró la doctora Vivian Santander, especialista en ginecología y obstetricia.
La también ecografista y perinatóloga llamó a los padres a observar las alarmas o cambios de actitud en las menores, al considerar que el 80 por ciento de los abusos sexuales a los niños son en el seno familiar, según Paraguay TV.
Santander resaltó la relevancia del paso entre un pediatra a un ginecólogo para la consulta de las púber y adolescentes, al constituir edades claves para el cambio de especialistas, más aun -enfatizó- en etapas de transformación corporal.
“El pediatra es responsable de las adolescentes hasta los 19 años –sentencio la experta- pero después es necesaria la búsqueda de especialistas en temas infanto-juveniles”.
La Comunicación de la madre con la hija –explicó- es muy importante, el núcleo familiar. En el caso de las niñas, conviene estar atentos a sus cambios. Esta comunicación es un mecanismo de prevención, agregó la especialista.
Santander informó, entre otras estadísticas internacionales, que el mundo registra anualmente 16 millones de nacimientos de madres de 10 a 19 años, de los cuales un millón corresponden a la edad de 10 a 14.
México ocupa el primer puesto del planeta en embarazos de adolescentes, entre las naciones de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos, con una tasa de fecundidad de 77 nacimientos por cada mil púberes de 15 a 19 años de edad.
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