En la ceremonia de colocación de la primera piedra, el presidente de la firma, Luis Alberto González, subrayó que la instalación, puesta en marcha y operación de la segunda fábrica es un gran proyecto de inversión, con el cual se contribuirá al desarrollo y fortalecimiento de la industria nacional, a través de la creación de más de 400 fuentes de empleo.
Así como, la instalación de las tecnologías más avanzadas y reconocidas dentro del sector permitirán alcanzar una capacidad productiva de siete mil toneladas mensuales de productos cárnicos, agregó.
La empresa Richmeat de Cuba S.A, filial de una compañía mexicana con el mismo nombre, en la actualidad cuenta con más de 170 colaboradores y ha aumentado paulatinamente su producción hasta alcanzar las tres mil toneladas mensuales.
González expresó que después de más dos años, hoy se ve consolidada una impactante realidad gracias al esfuerzo mancomunado de colaboradores, el apoyo de clientes, de las autoridades y «sobre todo por la confianza de Cuba que nos ha conducido hasta aquí».
Recordó que en los inicios de la primera fábrica solo contaban con una línea de producción, la cual permitía suministrar 150 toneladas mensuales, en un proceso de empaque manual.
«Poco tiempo después llegó la pandemia de la Covid-19, periodo en el cual nos vimos en la necesidad de aumentar nuestras producciones superando cualquier expectativa y creando nuevos empleos», explicó.
«Nuestro objetivo siempre fue claro: llegar a la mayor cantidad de mesas de las familias cubanas», sentenció González.
En tanto, la vicepresidenta de Richmeat, Alejandra Chapela, aseguró que la empresa seguirá trabajando por ser una referencia líder en el mercado nacional en imagen, calidad y desempeño operativo.
Por su parte, la directora general de la ZED Mariel, Ana Teresa Igarza, señaló que la planta es un ejemplo para otros usuarios de la Zona por su cumplimiento estricto de las regulaciones en materia sanitaria, de seguridad y salud de los trabajadores, además de la disciplina de su equipo de trabajo.
A la ceremonia de colocación de la primera piedra, realizada en el marco de la 38 edición de la Feria Internacional de La Habana, también asistieron el embajador de México en Cuba, Miguel Díaz, y la viceministra de Comercio Exterior y la Inversión Extranjera Déborah Rivas.
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