La iniciativa contó con el apoyo del Programa Mundial de Alimentos (PMA), y según su representante en este país centroamericano, Georgia Testolin, los paquetes se llevan a las casas a través de los centros escolares.
Recientemente, tras la salida del cargamento para los diferentes territorios, la ministra de Educación, Lilliam Herrera, manifestó su agradecimiento al PMA por apoyar los planes del gobierno sandinista y ayudar a las familias.
Con un valor de 1,8 millones de dólares, la carga alimentaria cuanta con paquetes de unas 39 libras que contienen aceite vegetal, arroz, maíz, frijoles y harina de trigo.
Dichos víveres se reparten como parte del programa de merienda escolar implementado por el Ejecutivo sandinista, iniciativa de protección social que proporciona alimentos nutritivos calientes a miles de estudiantes de preescolar y primaria.
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