La Policía Judicial sospecha que los detenidos, con edades comprendidas entre los 22 y los 58 años, cometieron crímenes relativos, además, al blanqueo de capitales y falsificación de documentos, según un comunicado difundido aquí.
En la operación participaron unos 400 efectivos de fuerzas combinadas en varias ciudades de la región del Alentejo, en el sur del país.
Los sospechosos integran una estructura criminal dedicada a la explotación del trabajo de ciudadanos inmigrantes, en su mayoría reclutados en sus países de origen, como Rumanía, Moldavia, India, Senegal, Pakistán, Marruecos y Argelia para trabajar en explotaciones agrícolas en esa región, precisó la Policía Judicial.
Según medios televisivos nacionales los detenidos atraían a las víctimas bajo la promesa de que obtendrían alojamiento, condiciones de trabajo y salarios dignos.
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