El material de 27 minutos estuvo a cargo de la Empresa de Informática y Medios Audiovisuales (Cinesoft) y de los realizadores Dinora Romo y Julio Alberto Salve, quienes se enfocaron en mostrar cuánto influyeron las vivencias en Birán en la formación de Fidel.
Escogimos imágenes muy frescas de la familia para apoyar la historia. Mostramos el verdor de los espacios y los animales; además de la picardía del Fidel niño y sus proyecciones en defensa de sus hermanos y las personas de su entorno, explicó Salve a Prensa Latina.
Según precisó el Jefe del Grupo Audiovisual, para materializar la iniciativa contaron con la ayuda del Centro Fidel Castro, el Memorial de la Denuncia y, en especial, de la periodista Katiuska Blanco, encargada de conducir el documental a través de historias y anécdotas.
Creo que la etapa en la universidad fue una de las más importantes etapas del Comandante en Jefe pues fortalece sus ideales. Por eso utilizamos un título muy sui géneris porque a Fidel siempre lo vamos a ver como un eterno rebelde, eterno pionero y eterno joven, sentenció el líder del equipo de Cinesoft.
Al decir de Julio Alberto Salve, el tiempo de la producción fue de unos tres meses y se emplearon las locaciones del Centro Fidel Castro para las grabaciones, además de las imágenes de archivo y videos para reforzar la idea que deseaban transmitir los creadores.
La pretensión a futuro es proyectar el audiovisual en centros educativos de todo el país con el objetivo de continuar indagando y descubriendo facetas del Comandante, gracias al asesoramiento de los maestros que pusieron sus conocimientos para hacer realidad el proyecto.
mem/yrv