“Me alegra mucho que haya un avance grande y un impacto muy positivo para el sistema de salud cubano y para la campaña de vacunación contra la Covid-19, lo que va más allá, por lo que será duradero”, dijo a Prensa Latina Kenji Hirata, embajador de Japón en la isla caribeña.
Durante un encuentro desarrollado en esta capital, representantes de instituciones científicas y del sector de la salud expusieron sus experiencias en la ejecución del proyecto que, según funcionarios del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef), marcha al 70 por ciento y debe finalizar en abril de 2024.
La representante de Unicef en Cuba, Alejandra Trossero, destacó el impacto del acuerdo en aspectos como el sistema de cadena de frío, insumos, equipos médicos y de protección para el personal, fortalecimiento de la capacidad instalada, y sobre todo lo relacionado con Biocubafarma, especialmente con el Instituto Finlay de Vacunas y el Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología.
Ejemplificó con el fortalecimiento de la cadena de frío en 255 policlínicos de la asistencia primaria de salud y 13 hospitales de atención materno infantil con la adquisición de 447 refrigeradores precalificados por la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Además, esto benefició a dos centros científicos pertenecientes a Biocubafarma vinculados al desarrollo de vacunas.
Por su parte, Reynol García viceministro de Salud Pública agradeció por la existencia de este proyecto cuyos fondos se utilizan en la adquisición de refrigeradores, neveras, jeringuillas, ambulancias, equipos de ultrasonido de altas prestaciones e insumos para el tratamiento con oxígeno.
Subrayó que en los últimos años el gobierno de la nación nipona, a través de la Agencia Japonesa de Cooperación Internacional y otras instituciones, realizó importantes contribuciones a la salud cubana.
Entre ellas, detalló García, equipos médicos y piezas de repuesto que se han utilizado en 34 hospitales con el objetivo de fortalecer especialidades como la anatomía patológica, imageneología, endoscopía y otras.
Mientras, la cooperación con Unicef, dijo, ha ayudado a mantener los logros en el ámbito de la salud materno infantil, incluyendo el enfrentamiento a la pandemia con importantes donaciones, lo que permitió la cobertura de vacunas al 98 por ciento.
El viceministro resaltó que en tiempos de pandemia no se afectó el programa ampliado de inmunizaciones, lo cual constituye una prioridad para el país.
La Covid-19, precisó, confirmó que la solidaridad y la cooperación internacional son vitales en situaciones de emergencia.
Cuba, por su parte, con el contingente Henry Reeve ayudó a 42 países con el envío de 58 brigadas médicas.
También recibió donaciones de países amigos, agencias de Naciones Unidas, ONG y otras instituciones.
Salvar vidas tiene que ser la prioridad en estos momentos, concluyó García.
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