Recién llegado al país y tras ejercer su derecho al voto en los comicios municipales, el mandatario destacó la disposición encontrada en todas las contrapartes para elevar las relaciones políticas y avanzar en la colaboración, lo cual se expresa en asuntos como la restructuración de la deuda.
Este es uno de los logros específicos del periplo, valoró, pues los acuerdos en este ámbito permitirán destrabar proyectos ralentizados o parados debido a la imposibilidad de negociar las obligaciones contraídas.
«Cuba tiene la voluntad, disposición, el deber, y lo hará con honor, de honrar las deudas que tenemos con otros países», subrayó Díaz-Canel, quien dijo que a partir de este paso se les da continuidad a varios planes conjuntos, otros se amplían y se suman nuevos programas de cooperación, intercambio comercial y negocios.
Dos temas fueron priorizados en materia de proyectos: la energía y la producción de alimentos, apuntó.
En cuanto a la energía, se trabajó en dos direcciones fundamentales: la primera, el suministro de combustibles con estabilidad; y la segunda, la ayuda para mejorar la situación de las plantas generadoras, tanto con tecnologías, como mediante el empleo de las fuentes renovables de energía.
«Hay varias compañías interesadas, proyectos de gobierno y hay algunos concretos que se dieron a conocer, como la donación por Argelia de una planta fotovoltaica para La Habana», detalló el mandatario.
En tanto, la cooperación para la producción de alimentos tiene varias aristas, desde el suministro de distintos renglones, hasta planes de desarrollo para producir en la isla con tecnologías de esos países y que haya un mejor abastecimiento.
Un asunto común priorizado, precisó Díaz-Canel, es la creación de infraestructuras bancario-financieras robustas, que permitan el intercambio financiero y bancario directo para evadir las medidas restrictivas del bloqueo estadounidense contra Cuba, y también las impuestas a países como Rusia.
El turismo, la biotecnología y la salud pública son otros campos en los cuales se trazaron acciones, pues al decir de algunos empresarios, tienen los mercados y las fábricas, pero la nación caribeña tiene los científicos y los productos, relató el presidente. Otras áreas de trabajo son la industria manufacturera y la participación en el comercio interior, a partir de lo aprobado en relación con la inversión extranjera en el comercio interior, tanto mayorista como minorista.
Proyectos en el transporte, la industria y el intercambio de educación, educación superior, cultura y deporte formaron parte de los asuntos abordados.
Hay documentos firmados y existen los mecanismos de seguimiento a la agenda de cooperación, en unos por comisiones intergubernamentales y en otras por consejos ministeriales, que deben efectuarse en los primeros meses del 2023 y donde deben concretarse las ideas que quedaron pendientes.
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