El gobierno despliega enormes esfuerzos para entregar la ayuda humanitaria a quienes la merecen, y ofrece facilidades para el éxito de la labor de los organismos internacionales, incluido el Programa Mundial de Alimentos (PMA), dijo el canciller al recibir hoy al funcionario de la ONU.
Instó a centrarse en los programas de recuperación temprana y no vincular la labor humanitaria con agendas políticas que algunos gobiernos intentan imponer.
Según denunció el jefe de la diplomacia siria, las medidas coercitivas unilaterales impuestas al pueblo sirio por parte de Estados Unidos y la Unión Europea tienen impactos negativos y obstaculizan el trabajo humanitarios de los organismos internacionales.
A su vez, el funcionario del PMA saludó la cooperación de las entidades gubernamentales sirias por su cooperación con el Programa y sus esfuerzos para facilitar sus trabajo en la prestación de servicios y la entrega de ayuda humanitaria a quienes la necesitan.
La comunidad internacional debe esforzarse más para ayudar al pueblo sirio a superar las dificultades y los desafíos, agregó da Silva.
Según datos de Naciones Unidas, la inseguridad alimentaria afecta a más del 60 por ciento de los sirios, pero Damasco atribuye esta situación a la guerra multifacética sin precedentes que enfrenta, incluido el saqueo de petróleo, trigo y algodón por parte de las fuerzas del Pentágono presentes ilegalmente en las zonas con mayor riqueza agrícola y natural del país.
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