De acuerdo con la organización sin fines de lucro, la mayoría de estos actos ocurrieron cuando los periodistas realizaban coberturas de las protestas y fueron cometidos principalmente por las fuerzas del orden.
Solamente entre el 18 de octubre, día de inicio del estallido social, y el 31 de diciembre de 2019 se contabilizaron 171 ataques: 102 a causa de disparos de armas disuasivas, cinco por gases lacrimógenos, tres por vehículos lanza agua y 27 detenciones.
Otros 34 comunicadores sufrieron hostigamiento, como golpes, empujones y controles arbitrarios de identidad.
Dentro de los casos más graves ocurridos en ese período figuran dos personas con pérdida ocular y el maltrato y la violencia sexual contra dos periodistas detenidas en Arica.
El informe señala también el lamentable fallecimiento de Francisca Sandoval, reportera de Señal 3 La Victoria, a causa de un disparo cuando cubría la marcha del 1 de mayo de 2022 en Santiago de Chile.
Además, hace referencia al ataque con disparos a un equipo de TVN en la región de La Araucanía en 2021.
El Observatorio del Derecho a la Comunicación, junto a la Organización de Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura, iniciaron un estudio con el objetivo de contribuir a la protección de los trabajadores de la prensa e impulsar el perfeccionamiento de las políticas públicas en la materia.
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