Estamos ante un tráfico muy lucrativo, en crecimiento, que involucra a organizaciones mafiosas y financia delitos muy graves, advirtió en declaraciones al semanario Le Journal du Dimanche, en vísperas de la presentación oficial de la iniciativa.
De acuerdo con el funcionario, los objetivos del nuevo plan son frenar el contrabando y hostigar a los traficantes.
Francia ocupó en 2020 más de 280 toneladas de tabaco y cigarrillos, alrededor de 400 el año pasado y unas 600 en lo que va del actual.
Attal afirmó que la estrategia gubernamental frente a esta ilegalidad es vigilar, interceptar y llevar ante la justicia a los responsables.
Queremos castigar a los contrabandistas con el mismo rigor que a los narcotraficantes, expuso.
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