En el centro del debate está la conformación del mecanismo encargado de redactar una nueva carta magna que sustituya a la vigente desde la época de la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990).
Las coaliciones afines al Gobierno, Apruebo Dignidad y Socialismo Democrático, abogan por un órgano donde todos sus miembros sean elegidos.
“Lo democrático es que las personas que vayan a integrar el cuerpo encargado de elaborar el nuevo proyecto sean cien por ciento electas por el pueblo”, declaró el secretario general del Partido Comunista de Chile (PCCh), Lautaro Carmona.
El PCCh, que integra la alianza Apruebo Dignidad, aboga también por un órgano paritario y con la participación de pueblos indígenas.
En el bando contrario, la opositora Chile Vamos es partidaria de una instancia mixta, con 50 por ciento de sus miembros designados por el Congreso y el resto electos, lo cual reduciría los espacios para los independientes, indígenas y representantes de la sociedad civil.
“Si acá no hay un órgano mixto, por lo menos este presidente de partido no está dispuesto a firmar ningún acuerdo”, dijo el máximo dirigente de la fuerza de derecha Renovación Nacional, Francisco Chahuán.
La presidenta del Partido por la Democracia, Natalia Piergentili, expresó su decepción porque después de tres meses no se lograra un consenso, ni avances significativos en el proceso constitucional.
El diálogo será retomado el lunes después de que los partidos consulten con sus bases el fin de semana.
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