«Estamos muy aliviados y agradecidos porque nuestro colega pueda volver junto a su familia después de más de cuatro años y medio», expresó la directora de la ONG, Bianca Kaltschmitt, en un comunicado.
El texto de Help hizo hincapié en que el objetivo principal ahora es atender a Lange y su familia y describió al funcionario como una persona que dedica su vida a la ayuda humanitaria.
Según datos del diario Spiegel, el directivo fue liberado, entregado a mediadores marroquíes y posteriormente trasladado a la embajada alemana en la capital de Malí.
Lange, de 63 años, fue raptado por hombres armados que posteriormente le habrían entregado miembros del Estado Islámico en el Gran Sáhara (ISGS), quienes reclamaban 20 millones de dólares a cambio de su liberación, pero hasta el momento no han trascendido detalles sobre el posible pago de un rescate.
El secuestro de funcionarios extranjeros, regularmente vinculados a ONG u organismos internacionales para pedir luego altas sumas o prebendas políticas por su liberación, es una de las estrategias que usan las organizaciones extremistas en la región.
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