El gravamen a las aeronaves ruidosas y antiguas será particularmente elevado en los vuelos de 500 kilómetros de recorrido.
Un informe publicado por el periódico digital europeo Preferente, añadió que ya el aeropuerto de Zaventem, en esta capital, cobra una tasa basada en el ruido (este impuesto no afecta a los aviones pequeños ni privados).
Pero ahora mencionan una carga de más alcance que entrará en vigor el próximo 1 de abril. Viene determinado por cuatro factores, como polución, emisiones de gases de efecto invernadero, destino y ruido. Será especialmente alto en viajes de 500 kilómetros, sin hacer excepciones con las islas, como es el caso del Reino Unido.
Voceros oficiales señalaron que el monto existente actualmente en Bruselas carece de la posibilidad de mantenerse intacto porque los niveles de ruido que se generan son muy elevados.
En las próximas semanas se publicarán detalles de cómo la nueva fiscalidad impactará en cada vuelo y modelo de avión, pues en el caso belga, esta medida pretende impulsar la renovación de flota.
mem/rfc
















