La entidad marroquí considera que tanto el árbitro principal, César Arturo Ramos, como el grupo encargado de trabajar en el VAR (Video Asistente Arbitral), cometieron un error en no decretar penal un choque protagonizado entre el defensor francés Theo Hernández y el delantero africano Sofiane Boufal.
En la jugada, el colegiado decidió sancionar con tarjeta amarilla a Boufal y la federación de ese país considera debió decretarse un penal en favor de su elenco que, de anotarse, habría igualado el marcador 1-1 en los finales de la primera mitad.
Por considerar que es una jugada de incidencia directa en el desenlace final del encuentro, la federación ha comenzado un proceso de reclamación ante el organismo mundial, en el que aseguran que: “no dudará en defender los derechos de su selección, pidiendo equidad en la adopción de las medidas necesarias ante la injusticia arbitral practicada en su partido contra la selección francesa, en la semifinal”, asegura el comunicado.
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