Según una nota de prensa de la Cancillería, las dos partes trataron las actividades del PMA en el país y el aumento de los esfuerzos para hacer frente a los actuales desafíos que enfrenta el pueblo sirio.
El jefe de la diplomacia explicó las dificultades que enfrenta Siria debido a las medidas coercitivas unilaterales que calificó de inhumanas, y exigió su inmediato levantamiento.
Se refirió también a las prácticas de las fuerzas estadounidenses en las regiones del noreste de Siria y su continuo saqueo del petróleo, trigo, algodón y diversas riquezas del país.
Es necesario que las Naciones Unidas desempeñe su papel y detenga estas violaciones y desenmascare las prácticas occidentales que le costaron a los sirios más de 100 mil millones de dólares estadounidenses de pérdidas directas e indirectas, precisó el Ministro.
El gobierno continúa sus esfuerzos para asegurar las necesidades de los sirios y proporcionar todas las facilidades para el trabajo de las organizaciones internacionales que operan en el país para satisfacer las necesidades de los sirios y lograr los objetivos de desarrollo y recuperación temprana de acuerdo con las resoluciones pertinentes del Consejo de Seguridad y las Naciones Unidas”, aseguró.
La funcionaria de la ONU, expresó su gratitud por el apoyo del gobierno para que el PMA desempeñe su rol e implemente sus proyectos y actividades en cooperación con varias autoridades locales en las diferentes gobernaciones sirias.
A su vez, el ministro de Administración Municipal, Husein Makhlouf, pidió durante su recibimiento a Fleischer, que se evite la politización de la ayuda alimentaria, en particular por parte de algunos países occidentales.
Llamamos al PMA y a las demás organizaciones humanitarias que operan en Siria a trabajar de manera transparente y que condenen las inmorales medidas coercitivas unilaterales que afectan a todos los aspectos de la vida cotidiana y los servicios básicos de los sirios, dijo el Titular.
También resaltó la cooperación existente entre las dos partes para hacer llegar la ayuda humanitaria a quienes la necesitan.
Según datos de Naciones Unidas, la inseguridad alimentaria afecta a más del 60 por ciento de los sirios, pero Damasco atribuye esta situación a la guerra multifacética sin precedentes que enfrenta, incluido el saqueo de petróleo, trigo y algodón por parte de las fuerzas del Pentágono presentes ilegalmente en las zonas con mayor riqueza agrícola y natural del país.
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