Borne precisó que si bien el texto será conocido el 10 de enero, su presentación en el Consejo de Ministros tendrá lugar el 23 de enero, para entrar a principios del próximo mes en la Asamblea Nacional.
En el centro de la polémica está la intención del presidente Emmanuel Macron de extender la edad de retiro de 62 a 65 años, objetivo que encuentra un repudio unánime en los sindicatos y también es rechazado por los partidos de izquierda, con llamados a protestar este mes contra la iniciativa.
Al respecto, la primera ministra mostró en declaraciones a la cadena Franceinfo flexibilidad, esgrimiendo sobre la edad que el Gobierno pudiera acudir a soluciones diferentes que el aumento a 65 años para conseguir su meta de lograr un equilibrio en el sistema de retiro de cara al 2030.
Actores sociales, específicamente gremios y patronales, están citados hoy y mañana en la sede del Primer Ministro, el Hotel de Matignon, para continuar el proceso de concertación encabezado por Borne.
De acuerdo con la primera ministra, la reforma de la jubilación no cambiará el umbral de 43 años de cotización para un retiro con pensión plena.
Asimismo, defendió la iniciativa, con el argumento de que el sistema está en déficit y necesita “un esfuerzo de los franceses” para financiarlo.
La reforma del retiro es considerada el proyecto estrella del reelecto Macron, quien tuvo que posponerla en su primer lustro en el Palacio del Elíseo (2017-2022) por la irrupción de la pandemia de la Covid-19 y la protestas y huelgas, que llegaron a paralizar el transporte en esta capital en diciembre del 2019 y enero del 2020.
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